De pesebre y cruz

San Esteban, protomártir

Para el día de hoy (26/12/11):
Evangelio según San Mateo 10, 17-22

(Hasta ayer nos emocionábamos con las imágenes mansas del pesebre y el Niño que nos ha nacido.

Y hoy pasamos de golpe al espanto del martirio de Esteban, diácono -servidor- dedicado a auxiliar a las viudas pobres. Era un hombre íntegro, cabal, capaz de vivir al extremo la justicia de la Buena Noticia, esa justicia que supone la entrega desinteresada, el destierro de toda intolerancia, el rechazo de la violencia, el cuidado de los pequeños y abandonados.
Un hombre que a pesar de tener todo en contra -el sistema religioso, el sistema político, la marginalidad de su fé vivida a pleno- no abdicó de ese Cristo al que amaba y que tenía siempre delante de sus ojos.

Es claro: vivir la Buena Noticia en plenitud significa ponerse en la otra vereda del poder. El amor y el servicio son considerados amenazas graves y peligrosas, y los poderosos se valdrán de mecanismos religiosos, políticos y económicos para acallar a los testigos de que otra vida y otro mundo, con Jesús, son posibles.

Parecería que nos vamos al extremo de lo vivido estos días pasados.
Nada de eso.
Es el mismo misterio el de Belén y el de Esteban, porque expresan el mismo amor)

Paz y Bien

1 comentarios:

Anónimo dijo...

quisiera ser como Esteban fuerte y valiente ante el pecado. anhelo algún día ser santa no para el mundo , si no para DIOS.

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