Buscando señales

Para el día de hoy (12/10/09):
Evangelio según San Lucas 11, 29-32

(Pedimos signos, requerimos señales, muchas señales.

Convertimos la fé -una cuestión de corazón y de amor- en un trueque, si me das tal cosa te prometo hacer tal otra, Señor muéstrame que debo hacer, Señor si de verdad me quieres te pido que hagas esto o el otro...

Y hay una sola señal importante, en toda la historia ha habido un solo signo auténtico, claro y definitivo: la Resurrección de Jesús.

Y el Señor hoy sigue dando señales, pero se nos ha anquilosado la mirada.
Esos signos están dados por mujeres y hombres buenos que dan testimonio de esa Resurrección, de esa Vida que de una vez y para siempre ha aplastado a la muerte.

A tener cuidado: no siempre esas personas-signos pueden ser cercanos, de nuestra comunidad, de nuestra Iglesia.

Hay mucha gente -innominada, quizás desconocida para nosotros e incluso ignorada- que son signos del Amor que Dios tiene para con cada uno de nosotros.

Del lugar más impensado aparecerán señales milagrosas de esa búsqueda constante del Padre hacia el bien de sus hijas e hijos.

Jonás para los ninivitas, la reina de Saba para el pueblo de Israel... Las señales pueden venir de donde menos se las esperan.

Los caminos del Señor son misteriosos e inescrutables, pero siempre conducen al bien y a la verdad.

Habrá entonces que re-pensarnos desde la conversión, es decir, desde un alma que se sabe imperfecta y falible, pecadora y escasa que constantemente quiere converger en el destino común que tenemos inscripto en el fondo del corazón desde el mismo Bautismo: la vuelta al Padre)

Paz y Bien

4 comentarios:

silvina soul dijo...

buena semana, muy interesante lectura,saludos...Silvina

misticaluz dijo...

Un placer visitarte, gracias por compartir la informacion!

Recibe un relajante y cálido abrazo

Beatriz

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Gracias Silvina, e igualmente para vos, una semana mansa y fructífera, plena del Espíritu. Un afectuoso saludo.
Paz y Bien
Ricardo

Ricardo Guillermo Rosano dijo...

Muchas gracias Beatriz por tu presencia y tus palabras. Un cálido saludo.
Paz y Bien
Ricardo

Publicar un comentario

ir arriba